¿Vale la pena lanzar un sitio web para ofrecer tus productos?

A pesar de que año tras año el comercio electrónico rompe récords de consumo tanto en Argentina como el resto del mundo, aún puede existir cierto escepticismo sobre los beneficios de ofrecer un sitio web propio. Por ello, nos hemos dedicado a reunir las cifras que respaldan el éxito del comercio en línea en sitios web dentro y fuera de Argentina en los últimos años.

Entre las industrias de mayor crecimiento online de los últimos años han alcanzado su éxito al enfocarse en sitios web propios. Por ejemplo, los expertos en análisis de casinos online Argentina señalan que las casas de juego en línea compiten arduamente por ofrecer cada vez mejores interfaces de uso que sus competidores, evitando a toda costa compartir el escenario con estos.

Las plataformas de compra venta no son suficiente

Para nadie es una sorpresa que Mercado Libre es una de las compañías argentinas de mayor éxito en el mercado internacional. Incluso, actualmente la compañía está valorada en más de 100.000 millones de dólares, vendiendo más de 20.000 millones en el año 2020.

Lógicamente, este éxito no solo beneficia a Mercado Libre sino también a sus usuarios. Entre ellos abundan emprendedores y compañías que utilizan la plataforma como único instrumento de comercio en línea.

Sin embargo, esta fama no se comparte, por lo que la mayoría de los gigantes del comercio electrónico utilizan métodos individuales al mismo tiempo para conseguir mayor reputación y hacer crecer sus marcas, y es aquí donde las páginas web se convierten en un factor fundamental.

La ventaja de los sitios web sobre las plataformas de venta

Si bien los portales como Amazon, Mercado Libre y Marketplace pueden ser de gran ayuda a la hora de vender, estos se llevan parte del crédito de las ventas al intermediar entre comprador y vendedor. Además de ello, hay que recordar que pueden cobrar comisiones por venta, algo que afecta directamente en la forma en que los clientes perciben tu producto.

Por otra parte, la experiencia de uso y el posicionamiento dentro de las mismas le pertenece al intermediario, mientras que en un sitio web el comerciante tiene la posibilidad de diseñar todo el sitio de forma que explote las ventajas y visualización de sus productos. De esta forma, pueden vender colocando sus servicios como principal protagonista de cada publicación.

El servicio de hosting y dominio le permiten a las marcas proporcionar una plataforma de compra de uso exclusivo y evitando que una caída de un hosting externo perjudique las ventas. Asimismo, utilizar un dominio y favicon exclusivo promociona la imagen y nombre de la compañía, además de facilitar la adición de un slogan.

Finalmente, hay que señalar que el tráfico y estadísticas del sitio web pueden ser manejados directamente por el propietario. De esta forma, se consiguen cifras más precisas sobre los comportamientos de sus consumidores dentro de la tienda. También, pueden acceder a un sinfín de datos que pueden señalar fallas y fortalezas que le ayuden a mejorar la experiencia de uso de sus potenciales clientes.