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Dos temas controvertidos en internet: la privacidad y el anonimato
Luego de que Edward Snowden sacara a la luz todo lo relacionado a las conductas de la NSA, no se hizo esperar la voz de la comunidad de internet solicitando mayor seguridad para sus usuarios. Es vital el papel de los intermediarios en internet, ya que son ellos quienes otorgan o rechazan el acceso a internet de los usuarios, en función de lo que establezcan las políticas y leyes del país donde operan.
Luego de que Edward Snowden sacara a la luz todo lo relacionado a las conductas de la NSA, no se hizo esperar la voz de la comunidad de internet solicitando mayor seguridad para sus usuarios. Es vital el papel de los intermediarios en internet, ya que son ellos quienes otorgan o rechazan el acceso a internet de los usuarios, en función de lo que establezcan las políticas y leyes del país donde operan.
Pero ante el temor de que estos intermediarios se conviertan en policías dentro de internet, la tendencia se inclina a una mayor restricción de los contenidos en internet, y un constante monitoreo de los mismos. Un ejemplo claro de esto han sido Microsoft y Google en casos de pornografía infantil.
El esfuerzo y empeño que realizan las empresas por hacer sus sistemas cada vez más seguros no solo redunda en beneficio de sus usuarios, sino también en el prestigio de sus marcas. Aquellas marcas reconocidas por proteger la seguridad de sus usuarios, incluso de algunas intromisiones gubernamentales, son consideradas más confiables y cuentan con un mayor número de usuarios.
Excepciones al anonimato y la privacidad en internet: Se trata de aquellos casos en los que, ante la comisión de un delito, se acepta la vulneración a la privacidad y el anonimato. En estos casos, se aceptan tales violaciones siempre y cuando sean temporales, excepcionales, necesarias, es decir, se trata del último recurso, y proporcionales al delito que se pretende combatir.
Existen principios internacionales sobre los derechos humanos que deben primar en las comunicaciones, y los límites necesarios que deben ser impuestos y considerados al momento de vulnerar la privacidad de algún sospechoso de la comisión de un delito.